Hoy día ningún español tiene dudas, (por
mucho que nos mienta el gobierno y la Comisión
Nacional para la Competencia se esfuerce en decirnos lo contrario), que
las todopoderosas mafias eléctricas están de acuerdo para incrementar el precio
de la factura de la luz, porque es la única forma que tienen estas compañías de
obtener cada año decenas de millones de euros en beneficios a consta del
consumidor. Sin embargo, las cinco principales compañías eléctricas españolas
aseguran, ¡pobrecitas! que están
sufriendo mermas multimillonarias en sus cuentas de resultados. Este argumento
no ha impedido que sus ganancias superasen los 7.000 millones de euros el año pasado. Ante estos datos yo me
pregunto, ¿cómo puede ser posible tener
beneficios arrastrando, como dicen, un déficit tarifario como el que dicen?
Creo que esto más bien se trata de una tomadura de pelo.
Desde el próximo mes de abril el
gobierno nos quiere aplicar un novedoso sistema que el ministro Soria se ha sacado de la manga,
como siempre por la vía decretazo. Este procedimiento consiste en cobrar los precios del consumo en cada franja
horaria, esto quiere decir que al día el precio podrá oscilar durante las
24 horas y aplicar a nuestra factura, no
la tarifa media del día, sino la más cara del horario de máximo consumo. Ante
este abuso, las familias que pretenda ahorrar energía no lo tiene muy claro,
porque para ello tendrá que gastar más energía justo en las horas de menos
demanda eléctrica… supongamos que sea de 3
a 5 de la madrugada. Sin embargo,
cuando TODOS pongamos la lavadora y
el lavavajillas en función al mismo tiempo, subirá la demanda y por lo tanto la
tarifa, por lo cual el precio será el mismo a las 3 de la madrugada, que a las 3
de la tarde. La cuestión es amargarnos la vida y rascarnos el bolsillo.
Para muchos hogares, el uso normal de la
electricidad, el gas o el agua se han convertido en un producto de lujo,
teniendo una producción del 40% de
energía de procedencia Renovables que, como es gratuita este gobierno las ha dejado con el “culo al aire”, las ha abandonado del mismo modo que ha hecho con las familias sin
recursos. El gobierno ha llegado a unos extremos de degeneración humana,
que parece disfrutar haciendo padecer a la gente. Hasta la Cruz Roja advierte
que esta situación puede provocar la muerte prematura a más de 3.000 personas este invierno. Algún día
nos daremos cuenta que estamos representados por un gobierno reaccionario de doctrinas
fascistas, que sólo defiende los intereses de la oligarquía heredera del
franquismo y los grandes poderes financieros que se asientan en un sistema
feudal acostumbrado a grandes privilegios y derechos desmedidos, frente a una
clase baja de trabajadores de bajo costo, y sobre explotados.
Esta situación de chantaje energético nos afirma que estamos en manos de unos
personajes sin escrúpulos como el señor Sánchez Galán que son quienes controlan
los suministros energéticos del país. Por lo tanto es necesario y urgente volver a nacionalizarlas, porque siendo
un sector estratégico ejercen la tiranía y chantajean al pueblo de manera
salvaje como están haciendo. Esta condición no se crea de hoy para mañana,
corresponde a un plan urdido por las empresas del sector en colaboración con
los gobiernos de turno.
Llegar hasta aquí no es difícil, antes tienen que buscar
a la persona adecuada entre individuos con
experiencia en corruptelas, y tras una ardua selección se le nombra para el cargo por ejemplo, de
ministro. Ahí empezará a colaborar exclusivamente para defender los intereses
de las empresas energéticas, y una vez terminado su periplo ministerial, será
cuando esa persona como pago a sus servicios, pasará directamente a formar parte del consejo de
administración de la compañía más “necesitada” del sector. Desde ese instante
estará disponible para llevarse unos 200.000
euros calentitos, digamos a Gibraltar, por nombrar un país cercano. Si alguien
lo pone en duda, que le pregunten a los 25
ex altos cargos políticos refugiados en las compañías que manejan el sector
energético.
Si alguien pensó en algún momento que
estaríamos en mejor situación gobernando estos señores, supongo que habrán
cambiado de opinión.
Saludos, Miguel.