Los
inútiles comparsas de Rajoy pretenden hacernos creer que el Estado no dispone
de fondos para subir las pensiones a los jubilados. Esto dicen precisamente
quienes viven cómodamente a costa de los contribuyentes, después de haber saqueado
la hucha de las pensiones con la finalidad de arrastrar a los pensionistas
hacia sus aliados banqueros que son quienes realmente disfrutan los millones de
nuestros impuestos que han sido utilizados para pagar su “rescate”,
subvencionar empresas de colaboradores afines o para “salvar” autopistas. Naturalmente
que no hay dinero para las pensiones, no puede haberlo porque parte de él se la
están llevando los buitres carroñeros que se apoltronan como “consejeros” en
las administraciones de esos mismos bancos o en las empresas rescatadas, y otra
porque las grandes fortunas no contribuyen como corresponde al fisco.
Pienso
que el gobierno del PP. disfruta de una total apatía social. Esta condición
hace que no les importe lo más mínimo lo que les suceda a sus ciudadanos,
puesto que desde que empezó la crisis, la banca no ha tributado ni un solo euro
de sus beneficios, pese que en los últimos diez años han podido ganar más de 85.000 millones de euros, y sus
directivos se han repartido algo más de
77 millones por sus “servicios”, solo en el año 2.017.
Es
indignante que en un país supuestamente democrático y europeo, sus ciudadanos tengamos
que salir a la calle para defender un sistema de pensiones ejemplar, que los
partidos protegidos por un régimen capitalista intolerante, con la colaboración
del partido socialista y los sindicatos mayoritarios, quieren hacer desaparecer.
Es un trato humillante dirigido hacia los ciudadanos más necesitados, estimulado
por el fascismo español, heredero político de la dictadura franquista, y un
socialismo que tolera o promueve pactos de protección y de silencio. Tampoco se
espera gran cosa de Podemos ni de su
aliado IU, que aceptó obediencia a la
monarquía y la impunidad impuesta por la dictadura. Como nada se puede esperar de
Ciudadanos, la nueva “derecha”
creada, según dicen por Aznar, que se alía con el Pp. para frenar cualquier iniciativa relacionada contra los
intereses partidistas o personales y de sus mecenas.
Analizando
las circunstancias actuales por las que atraviesa el país, nos da la sensación
que estamos cayendo por un pozo sin fondo y sin agua, con unos partidos
políticos acosados por la justicia, un gobierno insensible y en horas bajas,
incapaz de encontrar soluciones para instaurar la descompuesta unidad
territorial del país, y enfrentado con los partidos políticos nacionales, con
los ciudadanos indignados protestando en la calle. Con este amasijo de
despropósitos, no es de extrañar que España esté cayendo por un precipicio
donde no se divisa el fondo y nadie hace nada para evitarlo, además ocurre que la
mayoría de españoles aún no se han enterado.
Visto
lo visto, opino que no hay nada peor que dar atribuciones a un bobo motivado.
Saludos,
Miguel.