HABLEMOS CLARO

En estos días estamos observando que el expresidente del gobierno, el egocéntrico señor Aznar, está dejándose querer por los medios de comunicación adscritos a su política, desvariando como antes lo hiciese “aquel señor de la Mancha…” en sus enloquecidas alucinaciones. Alguien de su entorno debería aconsejar a este acomplejado personaje que estaría mejor manteniendo la boca cerrada.

¿Es que nadie se atreve a decir las cosas como son?

Alguien debe hablar alto y claro de las miserias morales de este falso individuo, que por lo visto pretende volver a meter baza en la política española, ¡como si no tuviésemos bastante!

Hoy me limitaré a recordar algunos de los hechos “memorables” realizados por este “iluminado” personaje:

Según insinúan instruidos analistas, este sucesor de la política rancia del franquismo, fue uno de los causantes de la peor crisis económica que ha destrozado a millones de familias españolas. Durante su primera presidencia (1.996 – 2.000), él y su amiguete Rodrigo Rato, idearon y llevaron a cabo la reforma de los reglamentos de las cajas de ahorros, con el único propósito de tener acceso a tomar el control político de estas entidades por donde entraron “a saco” en sus consejos de administración personajes tan incompetentes como corruptos que las llevaron directos a la quiebra. No conformes con ello, estos dos despreciables personajes regularon mediante decreto la Ley del Suelo, que dio lugar al especulativo boom inmobiliario allá por el año 2.001, que tan buen resultado dio al Pp. de la Comunidad valenciana bajo la presidencia de Eduardo Zaplana, que multiplicó al infinito sus ganancias con la corrupción urbanística, y establecieron las bases para que la Caja de Ahorros del Mediterráneo se transformara en una sucursal de la cueva de ladrones de Alí Babá durante el mandato de Camps, (el señor de los trajes).

Hoy no quiero criticar nada relacionado con su triste y retorcida gestión del accidente del Prestige que provocó la mayor catástrofe medioambiental de nuestra historia. Tampoco añadiré nada sobre las mentiras que vertió su gobierno sobre el accidente del avión Yakolev que improvisó el ministro Trillo. Ni de la trama que envolvió el capítulo del acuerdo que llevó a España a la guerra de Irak, por conseguir una foto en las Azores; como tampoco opinaré del atentado del 11–M, que culpaba a ETA para desviar la atención. Tan solo me limitaré a señalar que el señor Aznar debería estar ingresado en algún centro penitenciario especializado en salud mental por su contribución a la ruina de España.

Fue Aznar quien colocó al sinvergüenza de Blesa en la presidencia de Caja Madrid y quien le autorizó a pagar sobresueldos a los dirigentes del Pp.; fue él quien personalmente permitió a Correa  colaborar con el partido. Fueron Correa y Álvaro López (el Bigotes) quienes organizaron y pagaron el bodorrio de su hija en el Escorial. Fue él quien llevó a Rodrigo Rato a la vicepresidencia del partido y lo propuso para ser jefe del Gobierno. No fue sino él quien puso a Rajoy en la presidencia del partido. Fue su ambición desmedida quien le llevó a pagar la medalla de oro del Congreso USA con dinero público, etc.

Seguramente dejaré en el tintero muchos desatinos más de este personaje pero creo que para exponer con más o menos acierto la calaña de este individuo, es más que suficiente… por ahora.

Por último añadiré que sobran motivos para que cualquier juez o fiscal con un par de… razones, lleve a este personaje y a tantos otros como él ante los tribunales. En cualquier país decente de nuestro entorno, ya lo hubiesen hecho. España es diferente.

Saludos, Miguel.