Que España
es diferente ya lo sabíamos. Así decian los anuncios
publicitarios que intentaban vender la “Marca
España” hace unos años y que se ha vuelto a poner de moda. Es diferente a
otros países en muchos aspectos: en
tener la tasa de paro más alta
de Europa…, empresarios y banqueros
que acarrean el dinero obtenido a base de métodos fraudulentos, a paraísos
fiscales…, enfermos que mueren hacinados en los pasillos de
los hospitales…, bancos que roban a
sus clientes a “cara descubierta” amparados
por el Gobierno…, políticos adiestrados
que defienden sin pudor las células embrionarias y matan a indefensos
inmigrantes…, politicastros que se hacen
multimillonarios desde que entraron en política…, fiscales que protegen a los defraudadores de guante blanco y sangre
azul…, jueces expedientados por
atreverse a investigar los turbios manejos del Partido en el Poder…, senadores apoltronados en sus escaños
cobrando unos sueldos de escándalo por el sólo hecho de apretar un botón de vez
en cuando…, obispos que deberían
predicar con humildad y estar más cerca de las personas que sufren…, un presidente que miente cada vez que
habla con un lamentable desprecio institucional y demuestra tener el cerebro
más vacío que el armario de una pensión…, etc. etc.
Lo
dicho; España es diferente.
Es diferente también porque las leyes y políticas
impuestas por el Gobierno, van dirigidas exclusivamente contra sus ciudadanos con
el fin de restringir sus derechos, entre ellas la famosa “Ley Mordaza”, que cumple perfectamente su cometido. Todo aquel que
hable, se oponga o se manifieste contra el Régimen,
ha de pasar por los Tribunales de
Justicia, y ya se sabe que la mayoría de sus miembros son fieles a los
dictados del Movimiento Nacional.
Para el Gobierno, cualquier ciudadano que proteste es su enemigo, por lo tanto
será duramente sancionado. Los únicos que se beneficiarán con esta Ley son los miembros de la casta política que criminaliza cualquier
acto de protesta, a los demás intentan meternos miedo para que tengamos la
boca cerrada como sucedía en los mejores años de la época franquista. Se trata
de una evidencia más que confirma que el Partido
en el Poder ha pasado descaradamente
a la ofensiva contra los Derechos
Civiles y regresan a sus orígenes fascistas. Para ellos cualquier excusa es
buena cuando se trata de amordazar a los ciudadanos cuando defienden sus
derechos, lo mismo que hace años recogían las Leyes Fundamentales del franquismo.
Es diferente porque el Partido en el Poder intenta vendernos su Reforma
Fiscal como el caramelo del loro, un desagravio que beneficiará a los españoles más
castigados por la crisis. ¡¡Una leche!! Quiere subir el IVA del 21% hasta el 23%, la
cesta de la compra que en la actualidad está en el 10%, nos la suben al 21%.
Lo único que realmente baja es el IRPF
de las rentas más altas y el Impuesto de
Sociedades de las grandes compañías. Es decir, lo mismo de siempre, para
los de siempre. Subirán los impuestos a
los que menos tienen para que los que más tienen sigan aumentando su riqueza.
Por si fuera poco, el “Comité de Sabios”,
plantea la opción de cobrar un canon por entrar en las grandes
ciudades, (¡¡manda güevos!!),y el ministro Soria "desconecta" su reforma eléctrica hasta pasadas las
elecciones europeas. ¿Qué podemos esperar
de unos políticos sin moral?
Mientras esto ocurre, la oposición silbando
al aire más triste que un desierto sin arena, pensando en las elecciones
europeas, teniendo la certeza que con su silencio aborregado están ayudando a
que un Nuevo Fascismo renazca en España. Al fin y al cabo ellos pertenecen a la “casta política”, y mientras, buscan
desesperadamente la forma de orientar la actitud luchadora que antes tuvieron y
que debieron perder junto con la vergüenza por los pasillos del Congreso.
Dicen que en España hay 5 millones de parados que no sé dónde se
meten, porque veamos: si realmente
hubiese tantas personas sin trabajo estarían gritando a pleno pulmón reclamando
sus derechos por las calles y plazas de cada pueblo, y sin embargo apenas unos
pocos miles se atreven a salir de su casita. Sólo en mi tierra, algunos medios
de comunicación aseguran que desde que la señora “de” Cospedal García reina en su feudo manchego, hay 60.000 parados más que antes, 93.000 afiliados menos en la SS, y 3.700 autónomos menos, eso sin contar
los miles de jóvenes que tuvieron que emigrar “acogidos” a la política de “movilidad
exterior” de la Ministra del Paro,
doña Fátima Báñez.
¿Qué hace tantísima gente sin
trabajo?
Decididamente
no sé si realmente hay tantos parados, lo que sí debe haber son muchas personas
quietas que esperan bajo las higueras a que caigan las brevas en vez de subir
ellos mismos a cogerlas.
Saludos, Miguel.
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