Queridos amigos: Os aseguro que después
de tanto tiempo tratando de transmitir mi particular opinión valorando las
actuaciones de los poderes que representan al pueblo de España, por cansancio, he
llegado a pensar en arrojar la toalla, dejar de publicar las cosas que suceden
en mi país, que a no tardar sucederá en otras naciones de Europa. Sin embargo,
pensando en los cientos de personas del todo el mundo que leen regularmente mis
artículos escritos sin ningún tipo de tapujos, sólo por ellos, por todos vosotros, seguiré escribiendo, a mi
manera, las acciones políticas que suceden aquí. En este país llamado España que de seguir con esta sinrazón por mucho
más tiempo, no reconoceremos ni los mismos españoles, ni auguro un feliz final.
De algún modo he de dejar constancia; mostrar al mundo lo que está sucediendo
con esta injusticia social que intenta adueñarse de la tierra.
Me
corroen las entrañas cuando veo la demagogia barata que utiliza este gobierno
para intentar frenar los desahucios. Es vergonzoso que este
hipócrita de presidente y su comparsa, prefieran rendirse ante la presión de la
banka, en vez de ayudar al pueblo necesitado que confió en ellos dándoles su
voto. Otro cadáver más, provocado por las malditas ejecuciones hipotecarias,
esta vez en Córdoba, caerá sobre sus conciencias, aunque dudo que la tengan. En
todo caso, acudirán a la iglesia, entonarán el “mea culpa”, y al rato
saldrán limpios de pecado, y vuelta a empezar.
El nuevo decreto ley que han presentado
sin contar con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, (PAH), ha vuelto a
dejar con el “culo al aire” a las mismas personas que estaban amenazadas por
los desahucios, y que según dice esta nueva ley lo seguirán estando. No
obstante, algunas familias, pocas, podrán
alargar su agonía otros dos años, aunque el final será el mismo. Esta ley,
según mi modo de ver es una broma que maldita la gracia que hace, una cortina
de humo para mantener a la gente distraída durante un tiempo. Está claro que el
diálogo Pp&Psoe, mientras estén liderados por esta caterva de políticos
farsantes, jamás logrará alcanzar ningún acuerdo. Por mucho que nos quieran
decir, estos partidos, ante todo, protegen al sistema impuesto por los bankos especuladores
que, al fin y a la postre, son quienes los mantiene en sus puestos. Ha tenido
que ser la justicia europea, mejor dicho, la abogada general del Tribunal de Justicia Europeo, quien
haya alzado la voz para decir que “…la
normativa española que trata sobre los desahucios, incumple las directrices
comunitarias de protección al consumidor sobre clausulas abusivas próximas a la
usura”. Estos partidos infames, con el consentimiento de todos los demás,
nos están engañando descaradamente y con alevosía. Es inmoral que los españoles
estemos financiando a la banka y en agradecimiento, ellos dejan a miles de
familias en la miseria. No es justo obligar a personas decentes con hijos
menores, sentenciados a vivir humillados de cualquier manera, pidiendo misericordia y despojados del techo que les cobijaba. Está
claro el compadreo existente entre Pp&Psoe que en este caso sólo se pusieron de acuerdo para votar en
contra de la “dación en pago”.
¿Qué
podemos esperar de esta camarilla de desvergonzados políticos?
Una cosa queda manifiestamente clara;
que entre los dos nos están dejando sin trabajo, sin ahorros, sin vivienda, sin
maestros, sin médicos y sin esperanza que esto se solucione pronto. Mientras tanto, políticos y sindicalistas
continúan cobrando cifras desorbitadas por calentar los sillones de los
consejos de administración de bankos y cajas de ahorros.
¿Estos
son los que van a solucionar los desahucios?
Ante esta destrucción de los derechos
sociales cabe preguntarse, ¿dónde están el resto de diputados que cobran 1.800
euros de dietas y hasta 3.000 más para taxis, que en la mayoría de los casos ni
llegan a pisar las Cortes? ¿Dónde están los señores senadores? Y a todo esto,
la iglesia… ¿por qué permanece callada?
A mi modo de ver, esto no puede seguir
así mucho más tiempo, porque resulta que el mismo día que entró en vigor la
nueva chapuza del decreto del gobierno, los jueces la criticaron (como
pudimos hacerlo cualquier español con un mínimo de dignidad),
“…porque a todas luces esta ley es
injusta e insuficiente en su contenido”, y predicen un alcance limitado.
Mantengo lo dicho, los políticos están pagados por el pueblo, y comprados por la
banka. Mientras tanto la iglesia escucha, calla y esconde sus vergüenzas bajo
su negra sotana.
Un saludo de Miguel
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