CUESTIÓN DE PRINCIPIOS

 

 

El artículo que leí hace unos días decía más o menos así: “Los españoles soportan la presión fiscal más alta de los países europeos”. Este desenlace estaba basado en un análisis comparativo entre países de nuestro continente más USA, Brasil, Rusia, India y China. Entre todos los casos estudiados, el resultado nos señala sin lugar a dudas que en España se pagan más impuestos que en los países donde se realizó el estudio. Yo pienso que este artículo se lo podían haber ahorrado: con sólo vivir unos días en España habían llegado a la misma conclusión.

La cuestión es que Alemania dicta los deberes, y nuestros sumisos gobernantes dirigidos por el excelentísimo señor Rajoy, nos lo imponen sin discutir los resultados con nadie, yo creo que ni entre ellos. Esto hace que este  “magnánimo” presidente esté siendo cuestionado no solo por los españoles, también dudan de su personalidad la mayoría de los representantes europeos. Nadie le cree capaz de cumplir las condiciones ordenadas por Bruselas, ni de mantener su mandato más allá de diciembre. Hasta sus más próximos colaboradores, incluyendo las conocidas sociedades que patrocinan el partido político que lo apadrina, están moviendo sillones buscando un relevo capaz de conservar el poder de un partido que solo ha tardado nueve meses en hacer agua.

No me dan pena las personas que votaron al PP y ahora vagan arrepentidos como alma que lleva el diablo, haciendo examen de conciencia y dándose golpes de pecho entonando el “mea culpa” con el rostro compungido. Les está bien empleado por confiar en un un partido sin un claro programa electoral y en la palabrería de unos políticos embusteros que sólo buscaban el poder con la finalidad de intervenir políticamente en los procesos jurídicos abiertos sobre todo en la Comunidad Valenciana, Baleares, etc. etc. Hace algún tiempo leí una frase de Abraham Lincoln que decía: “Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo”.

Lo dije hace unos meses en este mismo blog, “Marianico el Breve” carece de carisma para ocupar un puesto de responsabilidad: la presidencia de España le viene al menos diez tallas grande. Es incapaz de asumir compromisos por sí mismo. Viene a ser como un actor secundario buscando el papel de su vida. Ahí no queda el asunto: el Guindos ese, está tan fuera de órbita como su camarada Montoro. Entienden tanto de economía que por mucho empeño que pongamos, jamás entenderemos sus palabras. Seguro que es de lo que se trata; mucho tecnicismo, mucha retórica, y al final… humo. Aquello de la economía competitiva y sostenible, no se lo cree nadie, entre otras cosas les falta imaginación. Una cosa si entenderemos: que con todo, sólo tratan de cabrear a los españoles. Ellos están a salvo, recogiendo todo lo que pueden que no será poco; he leído que Rajoy está cobrando 870’56 € mensuales en concepto de dietas a pesar de vivir en la Moncloa. ¿Eso es decente? No obstante decreta otro ajuste más de cinturón para salvar la banka… ¡que se hunda como el Titanic, pero con todos los políticos dentro!

Soy de la opinión de que el cinismo político debería estar penado por la Ley.

De todos es sabido que las grandes fortunas esconden su dinero en paraísos fiscales, es por eso que la banka carece de liquidez. Sin embargo no debemos olvidar que existe la libre circulación de capitales, es por esto que en el instante que a los ricos les gravan con impuestos confiscatorios, el dinero inevitablemente  desaparece como por arte de magia. Tanto es así, creo yo, que alguien debería pensar en crear una ley que evitase esta fuga masiva de dinero, de lo contrario pagaremos el “pato” los de siempre, y ya está bien. España se ha convertido en un infierno fiscal.

Para acabar debo decir, que aunque sólo fuese por cuestión de principios, alguien del gobierno debería dimitir. Si lo hicieran todos, mejor.

Un saludo de  Miguel.