OFENSIVA CONTRA LAS PENSIONES

En este país mío y vuestro, los asuntos relativos a las finanzas continúan como de costumbre. Quiero decir que los poderosos siguen acumulando capital y poniéndolo a buen recaudo en paraísos fiscales, mientras los menos agraciados, o sea, los indefensos españolitos del montón, sobreviviendo como podemos. Mal para no variar. Los bankeros, pese a todo lo que digan, siguen pasándose por la entrepierna la ley contra los desahucios, y mandan a los jueces a cumplir su cometido, cosa que desempeñan puntualmente en detrimento de las familias afectadas. Otro suicidio por desalojo en Navarra confirma mis palabras. No obstante la mal llamada ley anti desahucios, ha sido aprobada por mayoría absoluta en el Congreso.

El gobierno nos demuestra una vez más el poco respeto que tiene a los ciudadanos que depositaron en ellos su confianza. Os juro que nunca creí que Rajoy, debido a su manifiesta cobardía, sería capaz de tocar las pensiones aunque sabiendo que siempre hace lo contrario de lo que dice, debí suponerlo. Está claro que pequé de ingenuo lo mismo que la mayoría de los pensionistas que creyeron en él, pensé que no se atrevería, sin embargo se ha rendido ante los Hombres de Negro de Bruselas, ha tenido que humillarse una vez más. Hay que reconocer que el señor Rajoy es una persona obediente. ¿Que le ordenan hacer una ley para disponer de mano de obra barata pese a quien caiga? Rajoy va y la hace; ¿que le mandan no compensar la desviación de la inflación? pues nada, no se revalorizan las pensiones contributivas y asunto resuelto. No les importa lo más mínimo que los jubilados tengan una pérdida de poder adquisitivo de 469 euros, mientras que ellos, los políticos tienen asegurado su retiro. Además han amenazado con abrir la hucha de las pensiones. ¡Dios nos asista! Se pasan el debatido “Pacto de Toledo” por el arco del triunfo, mientras el resto de partidos silban al aire mirando descaradamente hacia otro lado.

Siempre creí que cuando alguien se jubila, sobre las cotizaciones a la SS que haya mantenido en toda su vida laboral, se establece unos baremos y dependiendo del resultado total, le corresponderá una paga mensual más o menos alta. Como consecuencia de la misma se firma el acuerdo en un contrato con el beneplácito del Estado. Si el gobierno decide unilateralmente incumplir este acuerdo, estaría cometiendo prevaricación que está penada por ley, donde el Tribunal Constitucional tendría mucho que decir. En este caso el delito estaría valorado exactamente en 3.856 millones de euros, que tal vez vayan a los fondos de Hacienda, o dios sabrá en manos de quién terminarán.

Algunos intuíamos que algo así sucedería al término de las elecciones catalanas. Ante esta nueva bajada de pantalones de Rajoy, opino que las Asociaciones de Mayores, Jubilados y Pensionistas de España, algo tendrán que decir ante este nuevo ataque directo a sus asociados, o… ¿acaso prefieren esconder la cabeza como los avestruces? 

Creo seriamente que va siendo hora de dejar las lamentaciones y pasar a la acción de una puñetera vez.

El cinismo de nuestros políticos no tiene comparación con la realidad que se vive en España. Miles de funcionarios públicos dejarán de cobrar la paga extra de navidad. Sin embargo, estos políticos chupópteros insaciables que se supone que también lo son, la van a cobrar. Entre los funcionarios, los parados que apenas sobreviven con el subsidio, los jubilados, las viudas, etc., etc., que difícilmente les alcanza para comer, no podrán celebrar las navidades ni siquiera con un miserable trozo de turrón. Finalmente esto acabará afectando a las previsiones de consumo para este mes que, sin duda, caerán en picado.

Los españoles somos cobayas de un feroz sistema capitalista, víctimas de una cruel especulación, y estamos padeciendo los resultados. ¿Hay derecho a que destinen 600 millones de euros de nuestros impuestos para subvencionar la tauromaquia? Pues así nos va.

Hace 10 años que nos quedamos sin las pesetas, y unos 4 que apenas tenemos un puñetero euro.

Os saluda, Miguel.